Un juez federal en EE.UU. bloqueó este miércoles temporalmente las restricciones al asilo aprobadas la semana pasada por el presidente Donald Trump, que buscaban dejar fuera del sistema a la mayoría de solicitantes centroamericanos.
La decisión de este juez, con tribunal en San Francisco (EE.UU.), reemplaza un fallo judicial anterior también de este miércoles que dejaba en pie la medida de Trump, en una efímera victoria para el mandatario.
Con este fallo, el juez, Jon S. Tigar, obliga al Gobierno de EE.UU. a seguir aceptando las peticiones de asilo de todos los solicitantes que lleguen a la frontera.
La ley vigente permite que un migrante que huye solicite asilo en cualquier punto de la frontera. En el caso de los menores, leyes y acuerdos judiciales impiden que sean deportados de manera acelerada y exigen que sea un juez de inmigración quien resuelva sus casos.
Hasta ahora la regla temporal de asilo solo estaba en vigor en Texas “de manera limitada”, dijo el diario The New York Times.
El juez Tigar escribió en su veredicto que “esta nueva regla es probablemente inválida porque es inconsistente con las leyes de asilo existentes”. Y agregó que la decisión del gobierno de implementarla fue “arbitraria y caprichosa”.
Se espera que el gobierno de Trump apele la decisión para revertir el fallo.
El gobierno ha señalado que la medida permitirá contener una crisis humanitaria en la frontera causada por los abusos a la ley de inmigración provocados por los migrantes debido a una serie de vacíos que el Congreso, principalmente los demócratas, se resisten a eliminar.
- Hablemos de ‘La Sustancia’: ¿Qué se hizo Lindsay Lohan en la cara?
- Personas sin hogar, las más vulnerables en climas severos
- Cracks: los secretos finalmente revelados
- ¿Dime cómo termina? la pregunta sin respuesta que plantea la escritora Valeria Luiselli
- Ser más que un diagnóstico: Superando las barreras de la Neurofibromatosis tipo 2
La regla temporal de asilo que el gobierno puso en vigor en la frontera con México el 16 de julio, obligaba a los migrantes que huyen de sus países a pedir protección primero en un tercer país antes de hacerlo en Estados Unidos. La medida no solo dejó a la deriva a miles de familias que huyen de sus países, sino también a miles de menores centroamericanos no acompañados en territorio mexicano.