Mirna Fernández, una joven madre mexicana, y diseñadora de vestuario de la compañía local de artes escénicas Cazateatro, se estrena como empresaria con “Dream upon a dress”, una boutique de ropa lista para cumplir los sueños de niñas y jovencitas, pero también los de la propia emprendedora.
Hace casi dos décadas Mirna dejó su casa, padres y la tierra que la vio nacer, para forjarse un camino al lado de su esposo en Estados Unidos, con una maleta llena de sueños, retos e incertidumbre.
Mirna Lili Fernández Rangel nació en Veracruz y creció en Guerrero, México. Muy joven contrajo matrimonio, y con su pareja decidió buscar su sueño americano en el país vecino. Llegó directo a Memphis, y aquí, por azar o por destino, encontró su vocación, no sin sortear obstáculos.
“Encontrar el sueño americano ha sido difícil. Dejas a tu familia, tu patria, todo. Te enfrentas a un mundo nuevo. Es bien raro, pero desde el momento que pisas suelo estadounidense ya es todo diferente. No es fácil adaptarte. Ya tengo tantos años aquí, que ya no sé si soy de aquí o de allá (ríe), siempre voy a extrañar mi tierra”, reflexiona Mirna en entrevista con El Informante de Memphis.
Año con año, para celebrar las festividades de Día de Muertos, Cazateatro presenta a las “Catrinas”, inspiradas en el famoso personaje del ilustrador mexicano Guadalupe Posada, que representa a la muerte ataviada con un sombrero de plumas, y vestida a la moda europea del Siglo XIX. Y precisamente ha sido Mirna la encargada de confeccionar muchos de los majestuosos vestidos de las Catrinas de Cazateatro usando materiales como cortinas, encajes, vestidos de segunda, pero sobre todo, mucha creatividad.
“No soy costurera, pero soy experta en piquetes de aguja y pistola de silicón, saco mi pistola y nadie me detiene. Así es como están hechos los vestidos de Catrina”, nos cuenta divertida.
“En Cazateatro empecé a hacer cosas para el grupo, que si algo para la escenografía, que si se necesitaba algún disfraz, entonces me imaginaba que si modificaba una pieza con algún otro material, iba a salir algo diferente.
“Después llegó lo de las Catrinas y comencé a crear los vestidos. Yo no soy costurera como tal, no los confecciono de cero, pero modifico las prendas. De un vestido y de otro creo uno, corto lo que se necesita, pego, añado, quito, y de ahí surgen las creaciones.
FOTO: N. Águila/El Informante. 
FOTO: N. Águila/El Informante.
“Primero busco un vestido que no tenga ningún tipo de diseño, que esté simple, y luego si encuentro otro vestido que tenga un encaje muy bonito o algún detalle que me pueda servir ¿qué hago?, se lo corto, se lo añado al otro vestido y así es como comienza la magia”.
Mirna ha confeccionado al menos una docena de vestidos de Catrina, así como otro tipo de vestuario para la casa teatral de la que forma parte desde hace 7 años. “Cada uno (de mis diseños) es diferente, y para mi, únicos. Los he hecho de cortinas de baño, encajes que le sobran a alguna falda, casi de cualquier cosa.”
El nacimiento de la empresaria
La confección, la moda y sus dos hijas adolescentes la inspiraron para estrenarse en el mundo empresarial y arrancar su boutique “Dream Upon a Dress”.
Aunque en su tienda ella no diseña ni crea los vestidos, sí se esmera por buscar modelos exclusivos, de alta calidad, que difícilmente se pueden encontrar en otros lugares.
“Inicialmente pensé en poner una tienda de vestidos de quinceañera, ya que mis hijas me decían: sí mamá, vende vestidos, a ti te gusta, pero después lo pensé bien, y me pregunté por qué mejor no hacer algo para niñas y jovencitas.
“Yo como mamá de niñas, cuando ellas estaban pequeñas, muchas veces me pasó que cuando las iba llevar a una fiesta, quería vestirlas como princesas, e iba de tienda en tienda para encontrarles sus vestidos, y era frustrante que no hubiera un lugar con vestidos tan bonitos como los de las quinceañeras, y de ahí surgió la idea de tener una boutique así, que tuviera un probador y que las niñas se sintieran tan especiales como una quinceañera.”
“Dream Upon a Dress” ofrece a las niñas y jovencitas una experiencia única para encontrar el vestido de sus sueños, de entre una variedad de ajuares de fiesta elegidos por Fernández. Las mamás y las niñas no sólo encontrarán hermosos modelos, sino también podrán vivir la experiencia completa en la selección y prueba del vestido soñado, con la mejor atención de la propietaria.
“No quiero comprar vestidos sólo por llenar mi boutique, tengo modelos elegidos cuidadosamente, para ofrecerle lo mejor a mis clientas”, aseguró la emprendedora.
A otros inmigrantes que como ella buscan alcanzar su sueño americano, les dice: “No lo pierdan. Llevenlo a cabo, aunque tengan miedo. Todos tememos aventurarnos en algo que no sabemos cómo nos podrá ir, ¡pero hay que hacerlo! Si tienes un sueño, aférrate a él y enfócate en lograrlo, ¡sí se puede!”, concluyó la creativa.
Por inauguración, la tienda abrirá del 30 de septiembre al 6 de octubre, de 10am a 7pm, y a partir de la siguiente semana los horarios regulares serán de jueves a sábado de 10am a 7pm, y domingos de 12pm a 4pm. 6829 Summer Ave., Bartlett, TN. 38134. Teléfono: (901) 5037224. Síguela en Facebook como Dream Upon a Dress. Y recuerda, cuando apoyas un pequeño negocio, apoyas un GRAN sueño.
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El Informante de Memphis
