La educación y la esperanza de un mañana
Soy latino y vivo orgulloso de mis raíces. Dos frases de Rubén Blades calan hondo en mi ser y dan mucho que pensar y reflexionar: “Una sola casa en América” y “una raza unida, la que Bolívar soñó.” Estas dos frases van cargadas de sentimientos profundos, mensajes de esperanza y de libertad. Sirven a su vez para fomentar la educación por medio de las artes, como lo es la música.
Ser latino (miembro de la comunidad latina), requiere fomentar nuestra cultura a donde quiera que vayamos. Esto requiere gallardía dentro del contexto histórico en el cual nos encontramos.
Ser latino requiere honrar y valorar nuestras costumbres y tradiciones, fomentándolas a diario, por medio de la educación.
“Somos una comunidad con tanto que ofrecer y con tanto que aportar que no debemos relegarnos a un determinado mes del año para realzar nuestra Cultura.”
Somos una comunidad con tanto que ofrecer y con tanto que aportar que no debemos relegarnos a un determinado mes del año para realzar nuestra Cultura. Hablo en un contexto singular, dada las circunstancias actuales, pero también somos conscientes de que cada país latinoamericano tiene sus propias costumbres y tradiciones, y que nuestra diversidad es tan inmensa como nuestros sueños.
Para reafirmar nuestro compromiso con nuestras raíces también es necesario reencontrarnos con nuestras costumbres y tradiciones. Es vital que nuestros “chiquillos”, aprendan más sobre nuestras tradiciones, en qué somos semejantes y en qué nos diferenciamos.
Ser latino es valorar los esfuerzos de nuestros ancestros, cultivando un sentimiento de solidaridad y fraternidad entre la comunidad Latina. Se requiere de un esfuerzo colectivo por parte de todos los miembros de la Comunidad Latina para poder aportar nuestro granito de arena y hacernos sentir.
La educación transforma vidas, pero sólo sí somos portavoces de un mensaje de solidaridad y hermandad entre los miembros de nuestra comunidad.
El cambio comienza fomentando un pensamiento altruista en el cual unidos venceremos y el cambio llegará.
Concluyo con otro verso de Rubén Blades: “Con fe, siembra y siembra y tú va’ ver“.
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El Informante de Memphis
